Love Story

Rodonita, palabra de origen griego, significa rosa. Se conoce como mineral por derecho propio desde hace sólo 200 años. Es uno de los más potentes cicatrizantes, incluso puede transformar viejas cicatrices en piel normal. Se la llamaba la piedra del perdón, porque ayuda a destruir las cicatrices emocionales de vidas pasadas y nos anima a darnos cuenta de que cada moneda tiene dos caras. Nos advierte de que no busquemos la venganza porque siempre es autodestructiva y, de hecho, lo que no amamos en nuestra pareja también está en nosotros. Equilibra el yin y el yang, energizando el chakra del corazón. Estimula la circulación, es beneficioso para el crecimiento de los huesos, los órganos auditivos, cura los enfisemas, la artritis y aumenta la fertilidad. Al ser un potente regenerador celular, puede curar enfermedades autoinmunes, úlceras de estómago e incluso la esclerosis múltiple. Puede curar las dificultades de lectura en los niños, normalmente causadas por problemas psicológicos, y elimina los bloqueos en el cuerpo, liberando así nuestro flujo de energía.

La amazonita, también conocida como feldespato verde, es la piedra de los chakras de la garganta y el corazón. Da fuerza al espíritu y aporta pensamientos positivos. Ayuda en el duelo, alivia la tristeza y calma a quien la lleva. Tiene un efecto positivo sobre el sistema nervioso, la garganta, la tiroides, el hígado y también es eficaz en casos de osteoporosis. Como es un fuerte antiespasmódico, se recomienda sostenerla en la mano durante el parto y también alivia los dolores menstruales. Protege contra la contaminación electromagnética, por lo que se recomienda ponerla sobre el escritorio si pasas mucho tiempo delante de un ordenador.